De cócteles por Valladolid

Bruma, el cóctel que sabe a un refrescante bocado de pastelería

Y es que ya sea por la necesidad -o querencia- de explorar nuevos sabores, lo llamativo de su presentación o el nuevo auge del tardeo desde la pandemia, los combinados se están ganando un hueco en los paladares de los vallisoletanos y en los locales de la capital.

Así lo ve Daniel Pérez, gerente de uno de los establecimientos que ha hecho de la mixología uno de los pilares de su oferta hostelera. Desde hace ya cuatro años, el Madame X llena de vida la esquina entre la Plaza del Monasterio de San Benito y la calle Francisco Zarandona (junto al Mercado del Val) con una carta de cócteles que en su mayoría incluye creaciones propias y una decoración 'escandalosa'.

Esta particular y llamativa ornamentación tiene su base en el arte, en concreto en un cuadro de John Singer Sargent que da nombre y espíritu al local y que también luce en una de sus paredes. La obra, presentada en el Salón de París de 1884, se convirtió en uno de los grandes escándalos artísticos del siglo XIX.

Lejos de ser simplemente un retrato, la obra desató una tormenta mediática por su osadía implícita. La actitud altiva de la modelo, Virginie Gautreau, símbolo de la alta sociedad parisina, se interpretó por el público y la crítica como una amenaza al ideal moral femenino de la época, acusando al artista de vulgaridad y a la modelo de exhibicionismo -incluso cercano a la pornografía-.

Con el tiempo, el retrato adquirió un carácter casi mítico, convirtiéndose en paradigma de cómo el arte puede tensar las normas sociales sin quebrarlas y, de este modo, pasó a ser un símbolo provocativo que aún hoy fascina por su elegancia subversiva y su silenciosa rebelión. Tanto es así que multitud de artistas y cantantes se han inspirado en este retrato para sus creaciones. Hasta la reina del pop, Madonna, la utilizó como imagen y nombre de uno de sus discos.

Este carácter de rebeldía y atrevimiento que imbuye el local también se aplica a sus cócteles a la hora de imaginar sus propias creaciones. De estas ganas de innovar nace Bruma, uno de los preparados que integra la nueva carta, enfocada ya en las próximas fechas veraniegas. Con Licor 43 como base alcohólica, este combinado también incluye mango, pistacho y leche de coco en formato líquido. Tras mezclar estos sabores, una densa espuma de almendra y pistacho se corona con una ralladura de este último fruto seco para aportar un toque crujiente y completar la fusión de texturas.

Servido con mucho hielo, este combinado armoniza el frescor y los toques caribeños del mango y la leche de coco con el dulzor del licor dorado, que a su vez se ve potenciado por la esencia de los frutos secos. Con la espuma entrando en juego al remover el preparado, el trago adquiere otro matiz, uno que bien recuerda a un bocado de una refrescante pastelería o bollería que se bebe en lugar de comerse pero que deja un endulzamiento similar en el paladar. Todo ello por un módico precio de nueve euros.

Así, este Bruma ejemplifica la intención de los nuevos preparados del Madame X, que en esencia se inspiran en la coctelería Tiki, con esas notas tropicales y ese efecto refrescante. Con opciones tanto con alcohol como 'sin', la idea intenta unir el mundo del batido con la coctelería con sabores 'fáciles de beber' que inviten a acercarse al mundo de la mixología tanto a amantes como a clientes que quieran probar nuevas experiencias.

«Lo que intentamos hacer es algo un poco diferente a lo que podemos ver en otras coctelerías o en otros bares aquí en Valladolid. Cada coctelería tiene su toque, por así decir, y nosotros buscamos ese ocio de la tarde y por la noche, a veces traemos DJs... Buscamos una coctelería más divertida, no el típico cocktail tranquilo y reposado», explica Pérez sobre la filosofía que intenta infundir en sus combinados.

Además, añade Pérez, otra buena oportunidad de probar los nuevos tragos del establecimiento es el 'Scandal Vermut' del domingo, cuando realizan una colaboración con diferentes restaurantes de Valladolid como el Alquimia, el Matamales, La Loca Burger o el Montellén en la que ellos aportan las tapas que se maridan con sus bebidas y cócteles.