Adif licita los proyectos para rehabilitar el edificio histórico de la estación de Valladolid

El plazo para realizar estos proyectos es de 36 meses. Se licitan todos a la vez para que, una vez terminados, se puedan ejecutar las obras casi de manera inmediata, simplemente con la tramitación de una nueva licitación de obras. Esto deja margen para algún pequeño retraso, porque entre licitaciones y trabajos sumarían al menos 44-48 meses de trabajo, a partir de hoy, hasta poder comenzar con la obra del edificio histórico.

Hay que tener en cuenta que las obras de la nueva estación deberían comenzar en octubre de este año, aproximadamente, y tienen un plazo de construcción de 43 meses. Lo que ha intentado el Ministerio de Transportes, por tanto, es que coincida en el tiempo la finalización de una con el inicio de los trabajos en la otra.

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La actual terminal dejará de servir para albergar a los viajeros. Se restaurarán su envolvente y la marquesina histórica, se demolerá el centro de lata tensión de la calle Recondo, lo que permitiría «abrir» la calle a la nueva plaza de la estación, y se destinará a oficinas y a «usos comerciales ligados al ferrocarril». La marquesina histórica, que cubre los dos primeros andenes, tiene una superficie de 2.608 metros cuadrados.

Mientras tanto, el proceso de adjudicación de las obras de la nueva estación de trenes sigue abierto. El 28 de mayo se abrieron los sobres con las ofertas económicas, que situaban en cabeza del concurso público a la unión temporal de empresas formada por Ferrovial, ACS y Zarzuela, que rebajaban el presupuesto inicial hasta los 178 millones de euros. La nueva terminal debe dar cobertura al incremento exponencial del tráfico ferroviario de pasajeros que se espera en Valladolid en los próximos años. Así, la playa de vías pasará a tener cinco vías y dos andenes para los trenes de ancho convencional y otras siete con cuatro andenes para alta velocidad, con capacidad, dada su longitud, para albergar hasta 11 convoyes simultáneamente. La superficie del nuevo espacio de pasajeros será de 7.900 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y dos entreplantes.

Adif incluye en el contrato «un estudio de alternativas para el edificio histórico». Advierte de que esta terminal «atesora una importancia y valor patrimonial que lo convierten en una pieza clave dentro del conjunto ferroviario».